miércoles, 25 de noviembre de 2009

Mitchell Leisen



Uno de mis directores favoritos.
Y también un cineasta infravalorado, pero ahora no es momento de intentar hacer justicia. El cine de Leisen habla sobre las apariencias y la mentira. De hecho, su discurso en torno a la mentira me parece tan interesante, que alguna vez he pensado que resultaría perfecto para ilustrar las ideas de Kant con respecto a ese tema: eso sí, aunque Leisen, de una manera muy particular, nos viene a decir que los personajes de sus obras bien se podrían haber ahorrado las mentiras, pues sólo les han traído complicaciones, lo paradójico es que sin esas mentiras no existiría película. La vida transcurriría mejor sin mentiras, pero el cine resultaría muy aburrido sin ellas.